domingo, marzo 29, 2009

El fantasma de la guerra vuelve entre Perú y Chile


Por: Hugo Supo

La sombra de la guerra ha vuelto a asomarse en América Latina, el histórico conflicto armado del Pacífico vuelve a tomar vigencia, los peruanos y chilenos hemos vuelto a debatir en todo tipo de reuniones sobre nuestras potencialidades y debilidades, de nuestras valentías y cobardías con relación a los vecinos. Y como por añadidura, los bolivianos se han vuelto a meter a la danza, esta vez gracias a su presidente Evo Morales.

La demanda presentada por Perú ante la Corte Internacional de la Haya por el límite marítimo ha provocado una reacción airada de Chile, aún más, cuando la semana que pasó se oficializó la manifestación de la memoria de parte de los abogados peruanos respecto al diferendo.

Quizás es por el flamante canciller mapocho, Mariano Fernández, en tono prepotente sostuvo que “el mar no de vende ni se regala, el mar se defiende”, lo que sin duda puso más ají en la clase política peruana.

Al gobierno de Alan García Pérez se le criticó por agachar la cabeza frente a la actitud poco valiente mostrada ante Chile. Hubo quien le cuestionó demasiada diplomacia, que en fondo podía representar insuficiente firmeza y hasta cobardía.

En ese contexto, el mandatario boliviano Evo Morales se asomó a las discusiones insinuando que su país también irá a la Corte de la Haya para recuperar su soberanía en parte del Océano Pacifico. El Perú por su parte, desestimó la participación altiplánica señalando que nada tiene que ver con el tema.

Alan García dijo que “Bolivia había renunciado a su salida al mar”. Eso provocó mayor controversia y una protesta singular del gobierno boliviano: “Al presidente de Perú, Alan García, tal vez la mucha gordura le está afectando y no está bien informado”, pronunció Evo al descartar su renuncia a la salida al mar.

EL FANTASMA DE LA GUERRA
Los Andes recibió decenas de comentarios en su portal web luego de publicar el titular “Chile amenaza y Perú agacha la cabeza” el pasado jueves 19 de marzo, día en el que se presentó la memoria de la demanda marítima, recogido en las declaraciones de los gobiernos peruano y chileno.

Incluso hubo quien criticó el titular por considerarlo sensacionalista, no obstante, es necesario aclarar algunos datos que podrían reforzar la tesis de que el Perú está menos preparado que Chile para afrontar un eventual conflicto, una vez acabado el juicio en La Haya. Todo ello, a propósito de que la moda de una nueva guerra ha vuelto a ingresar a nuestra agenda nacional.

El pasado miércoles 25 de marzo, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) ordenó la transferencia de 160 millones 220 mil 742 nuevos soles a favor del Ministerio de Defensa, con el objetivo de reparar los aviones de guerra MIG 21 y comprar material antitanque.

Para cualquier ciudadano de pie, esa cantidad de dinero podría representar seguramente más que suficiente para garantizar nuestra soberanía. Empero, el monto representa un lunar con relación a lo que Chile presupuesta para sus fuerzas armadas.

En efecto, el presupuesto de Defensa peruano es de es de US$ 650 millones de aquí al 2011, mientras que el gobierno chileno incrementó su inversión militar a US$ 2,300 millones sólo el año pasado, lo que significa un crecimiento del 8.3% respecto del 2007, de acuerdo al Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS), con sede en Londres.

Es más, según la publicación peruana Caretas, en la última década, Las Fuerzas Armadas de Chile (FACH) han adquirido 10 cazas F-16 norteamericanos, otros 18 cazas F-16 holandeses, dos submarinos Scorpene, cuatro fragatas Meko-200 y 342 tanques Leopard.

Eso es evidentemente superior a las adquisiciones peruanas, si citamos que durante la gestión del retirado general Edwin Donayre se compraron 244 misiles rusos Kornet por
US$ 25 millones y otros 244 misiles Spike, de origen israelí, por US$ 48 millones.

DE CARRERA AL 2010
Teniendo en consideración que el diferendo marítimo con Chile se prolongará hasta después del año 2010, podríamos decir que una especie de carrera armamentista se da entre ambos países, aunque claro, muy silenciosamente.

En Chile, en el 2010 se culmina con una etapa del denominado Plan Bicentenario, el cual consiste en la renovación total de su material bélico, mientras que en el Perú, a esa misma fecha, solamente se pretende poner operativo a nuestro arsenal, según manifestó en Lima, el viceministro de Defensa Rafael Aíta Campodónico.

Es por esa razón que mandos militares en situación de retiro y políticos peruanos creen necesario replantear la política nacional de defensa de la soberanía. En suma, el año 2010 será importante para conocer las nuevas potencialidades bélicas de cada país.

APROVECHANDO LA COYUNTURA
Todo lo anterior, por supuesto, es exacerbado por la clase política de Chile y Perú, las que han tomado como “”caballito de batalla” este conflicto, previo a los procesos electorales que llevarán a cabo en los próximos años en cada país.

Incluso el presidente boliviano se ha sumado a la controversia, afirmando que sus intereses de nación se verán afectados por la decisión de la Haya. Esta semana, la relación diplomática entre Perú y Bolivia, se ve agravada por las declaraciones de Evo Morales quién calificó de “gordo y poco informado” al mandatario peruano.

Lo cierto es que sea con fuerza bélica o no, Chile ya tiene sembrado fuertes inversiones en nuestro país, al parecer con complicidad de los gobernantes peruanos, lo que en definitiva nos deja en desventaja ante un eventual conflicto armado. (publicado en www.losandes.com.pe)