jueves, diciembre 28, 2006

Entre pedestales y micrófonos


Por: Hugo Supo

Cuando empecé a conocer el mundo de la radio, sentí emociones que quizás nunca las vuelva a experimentar. Fue allá por los noventa y tantos, terminando el siglo veinte. Por esos años, la pegajosa tecknocumbia invadía las discotecas de radios, y los programadores de las FM, los orquestaban con ritmos “teckneros” que se retiraban de la pasarela de la boga.

Debió ser tanta la emoción, que pagué un “sencillo” por el alquiler de una hora diaria, de la que en vida fue, FM Kristal de Juliaca, cuyo joven propietario cedió gentilmente –claro está, pagando por adelantado- algunos minutos de sus emisiones para que este todavía insípido aspirante a locutor pudiera dar rienda suelta a impulsos radiales.

Un tiempo después, conocí a Juan Carlos y sus hermanos. Similar que en la primera, su radio “pirata” (Melodía) fue un gran salto en mi carrera de radialista, pues, si antes, pagando, me escuchaba mi hermano y los que me acompañaban en la cabina, ahora me sentía envanecido, por las ocasionales llamadas telefónicas de algún oyente despistado que me pedía una canción del recuerdo que no conocía.

Fueron años mozos, recuerdo que solía trotar por los cerros cercanos a la radio, antes de dirigirme a mi improvisado programa musical. Ya estaba consumido por la cumbia boliviana y mexicana, aunque siempre aprovechaba para soltar algún disco que al parecer pocos disfrutaban conmigo (The Rolling Stone, Michael Bolton, o Celine Dion con el sound track del Titicanic que se había puesto en moda).

Habrán pasado dos o tres años. Luego de ausentarme un tiempo, pues una decisión torpe me llevó a vivir experiencias gratas e ingratas -será motivo de otra historia- regresé a la radio, apenas principiaba el nuevo siglo.

Salkantay, Fuego, Súper Estación, Digital, Stereo Contacto, FM 92, Súper FM, Mega Stereo, Star, Satélite,….Sintonía y finalmente Pachamama Radio, fueron las emisoras en las que transcurría mi alegre vida de radialista.

De todas ellas, tengo experiencias que podría calificarlas de inolvidables, insuperables, enorgullecedoras, anecdóticas y hasta vergonzantes.

En la mi última etapa, Pachamama Radio, La Voz del Sur Andino, me ha acogido, y en ella me he desempeñado como reportero de noticias en los dos años previos a este. Es algo fenomenal.

Empero, ahora ha llegado un tiempo para pausar. El retiro no será definitivo, sin duda, la pasión por la radio (como la llamo en algunos spots) seguirá siendo pasión. Parece cursi, pero, es cierto, es sólo un hasta luego.

domingo, diciembre 24, 2006

¿Es esta la navidad que queremos?


Por: Hugo Supo

Carita sucia, no lleva zapatos, calza ojotas, con su tacita maltratada y jalando de la mano a sus dos menores. Corre, se emociona, tropieza, no importa, hay que seguir, se debe ganar la “cola”. Debe tener ocho años o algo menos, debe ser el mayor, quizás su padre no esté vivo, o tal vez, su mamacita es la que se fue al cielo. A su corta edad no sabe disfrutar una sonrisa, no la comprende.

Se detiene…observa. A su alrededor hay más de una oportunidad. A diferencia del año anterior, al dueño de la distribuidora de cervezas se le ocurrió ser “misericordioso”; en realidad, tal vez, lo que busca es sentirse mejor consigo mismo.

_ ¡Qué bueno soy!.. Miren como comparto lo mío, se dirá para sus adentros.

Una cuadra más allá, los locutores de una radio –los chiquillos ni siquiera saben cuál de las tantas- también reparten juguetes chuscos y baratos, los acompañan con un pedazo de bizcocho y chocolate mal cocinado. Como ingrediente especial del día, el “superevento” es transmitido en vivo y en directo.

_ ¡Este es otro trabajo de su radio, la que se identifica con su gente, lo que pasa es que aquí si trabaja gente solidaria, en la más popular!, se escucha en una FM local.

Justo al frente, los propietarios de una cantina decidieron exculparse de sus malos comportamientos, convocando a los que menos tienen, como queriendo mostrarse solidarios. Una semana antes, un muchacho fue asesinado a unos metros de allí, luego de que saliera embriagado de ese antro y a nadie le importó.

_ Tenemos tres opciones, pensaron los muchachitos con tacitas en mano.

El mayor, queriendo sacar provecho de la presencia de sus hermanos, ordena.

_ Julio, tú, corre a la radio; Chato, tú, allí la señora de la “chicheria” está dando juguetes, yo me quedo aquí.

En la mente de los que por estos días del año se piensan más solidarios y más humanos, quedará una satisfacción interior.

_ Oye diosito, mira lo que estoy haciendo, yo si me merezco el paraíso. No olvides enviarme un regalito eh… “ recuerdas el que te pedí?.

Sonreirán para si y para los suyos, ignorando que abrió aun mas, la amplia brecha que separa a los hombres de nuestro país, ignorando que logró discriminar a muchas “caritas sucias”, obligándoles a esperar su “donación” en medio del sol o de la lluvia...presumiendo a medio mundo su “caridad”.
Les pregunto: ¿Es esa navidad que deseamos para el mundo?.

martes, diciembre 19, 2006

Feliz Navidad y mejor año 2007


Por: Hugo Supo
Llegamos al fin de año, claro, como es natural es hora de reflexionar…pensar en lo bueno y malo que hicimos, en lo ventajoso y desventajoso que fue para nosotros y para los nuestros, el 2006.

No cabe duda, que el inicio del próximo año viene cargado con nuevas esperanzas, ganas y posibilidades. Diremos este 31 por la noche: es hora de enterrar lo malo que pasó, que venga el nuevo tiempo y con el las buenas nuevas…

Replicaremos para nosotros mismos: no quiero que regrese este año, porque fue el peor de mi vida, mi trabajo, el amor, quizás la salud…no quiero que vuelva otra vez.

Y nos tragaremos, al igual que las 12 uvas, el bocadillo amargo de las experiencias que no quisiéremos repetir, y que desgraciadamente regresarán algún cercano dia, porque, es ese el “chiste” de la vida: un bumerán de maldades y bondades.

En cambio, si el 2006, fue fructífero para nuestros ensueños, nos diremos mirándonos al espejo: éste fue el mejor de toda mi existencia, no quiero que termine, o en el mejor de los casos que se repita lo mismo en el 2007.

Trotaremos jalando las maletas de papá alrededor de la “manzana”, por la vieja casa, aquella donde crecimos y de la que ahora nos mantenemos distantes; con jolgorio, le gritaremos al mundo que somos felices y queremos seguir así. abrazaremos a los nuestros y talvez a los que no lo son.
Tengámoslo en cuenta: todo gira en torno a los temores y esperanzas que como especimenes humanos poseemos naturalmente, el futuro es incierto; pero todos quieren, desean, procuran, luchan, para que sea promisorio. Asi somos más humanos

En fin, seamos creyentes o no, Navidad y Año Nuevo, son momentos en los que lo humano se hace más de nosotros, nos comportamos como si tuviéramos sentimientos, pensamos en el prójimo, en los nuestros…Ojala -leí recientemente que este vocablo es antagónico a lo cristiano, pues proviene de “Ala lo Quiera”- que todo el año fuera así. Sin duda, ahora más que nunca, a los humanos nos hace falta ser más humanos. Te deseo el mejor fin de año y más próspero 2007.

lunes, diciembre 04, 2006

Juliaqueño gana premio por film “Sobrevivir en Los Andes”


Flaviano Quispe es un productor de películas en Juliaca, y en los últimos años ha logrado grandes reconocimientos, aunque seguramente para muchos, el trabajo que hace está enmarcado dentro de los parámetros del empirismo, de todas maneras, es bueno reconocerlo. Felicitaciones, porque este juliaqueño acaba de ser premiado con el premio CONACINE 2006

domingo, diciembre 03, 2006

El minero errante


Por: Hugo Supo

Supongo yo, que nació predestinado a ser lo que es, no le pregunté por su nombre, pese a haber charlado buen rato mientras el bus nos devolvía a casa. Una vez llegado al informal paradero de Juliaca, se bajó antes de yo y desapareció en medio de la multitud.

En realidad, fuimos nosotros los que subimos a medio camino luego de un trabajo periodístico que había concretado junto a mis tres compañeros en Putina (cerca de las zonas mineras de Ananea y La Rinconada). El día se acaba y era necesario regresar.

A nuestro colaborador en ese pueblo se le olvidó informarnos que había servicio de transporte sólo hasta el medio día, en especial los sábados, como era esa tarde. No había remedio, teníamos que retornar.

Se requiere más de tres horas en carretera de trocha para llegar a Juliaca, la ciudad comercial más importante de Puno. Junto a nosotros, viajaban sentados –porque nosotros no- comerciantes, mineros, familias enteras que provenían de la selva. Aunque en realidad eran migrantes de la sierra que ahora se terminaron por asentarse en la ceja de selva.

- Es usted periodista, me dijo.
- Pues si, vengo con mis compañeros.
- Yo trabajo en las minas…

Bajo de estatura, de pómulos ensanchados, canela quemado por el sol de la puna, un gorro deportivo le cubría la maltratada cabellera, quizás por los químicos que utiliza en las minas donde dice laborar. Sus gruesas y callosas manos lo sostenían de una varilla en bus camión. - Estamos viajando desde la madrugada, dijo, como buscando conversación y medio emocionado por la velocidad.

Cuando un hombre deja la familia, lo deja todo; los sinsabores, las peleas, las sonrisas, los perdones, los regaños, los lengüetazos del perro familiar, las pasajeras miradas de rencor con papá o mamá….mi ocasional compañero de viaje había vivido la experiencia. Era un errante optimista.

- No fue en vano, mencionó.

He recorrido del norte al sur y en viceversa. Que maravilla…no hay nada mejor que conocer nuestra tierra, decía sin saber exactamente cual será su futura aventura e intentando lograr alguna envidia.

Me habló de las minas de Potosí, de Cerro Verde, Pasco, Yanacocha y unas cuantas más que ya no recuerdo. Habló de sus aventuras, de sus ingratitudes, como si en el corto viaje quisiera lograr un desahogo con este desconocido para que nadie más se de por enterado.

Para hombres como yo siempre hay trabajo, cómo se queja el resto, me dijo, un poco orgulloso y otro tanto resignado por su destino. Como queriéndome hacer entender que no fue la cruda realidad que lo obligó a ser asi, sino su propia voluntad. Aunque seguro estoy que no fue así.

Había liderado grandes exploraciones mineras, hace dos días, según dijo logró descubrir una nueva beta de oro en algún distrito de la selva puneña. Su vida fue sin duda toda una experiencia, una vida entre lo simple y complicado.

En el Perú, habemos gente de ese tipo. Reacios a la vida, buscamos lo que quizás nunca encontremos, a veces seguimos el rumbo de una huella que nos llevará a un lugar en donde dejaremos la existencia y tal vez nadie se entere.

sábado, diciembre 02, 2006

Carmela Sifuentes es la nueva “men” de la CGTP…qué cambiará

Por: Hugo Supo
Realmente me parece un argumento muy hipócrita pensar que las mujeres son la solución a todos los problemas del orbe. Al menos ese es el panorama que puedo ver cada vez que ocurre una aislada elección de una dama a algún cargo importante ya sea dirigencial o ejecutiva.

Es cierto. En los últimos años la mujer peruana ha cobrado un protagonismo especial en la escena política. Aunque no en cantidad suficiente, en la anterior campaña presidencial, dos mujeres compitieron por alcanzar el mandato nacional.

Luego, para las elecciones regionales y municipales, la participación de la mujer estuvo enmarcada en la “Ley de Cuotas” por la que se determina que a cada plancha presente por lo menos dos o tres mujeres candidatas a regidoras o consejeras. Sin embargo, el liderazgo femenino continuó sujeto a los intereses de una sociedad machista, pues si bien hubieron lideres mujeres (candidatas) sus listas estaban integradas en su mayoría por varones.

Y en recientes días, la mujer, ha regresado a ser tema central en los comentarios periodísticos y por su puesto de las organizaciones feministas que buscan su justa reivindicación.

En las elecciones de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) llevada a cabo en el XII Congreso Nacional de ese gremio, salió elegida por primera vez en la historia del Perú, una mujer presidenta. La catedrática Carmela Sifuentes Hinostroza es ahora la principal sindicalista que reclama los derechos laborales.

Pero, esta elección nos trae a la reflexión sobre el papel que cumple cada mujer líder en el país. Se trata de analizar si por el solo hecho de ser mujer, la realidad podría mejorar para las organizaciones a quienes representan o para la sociedad en general.

Los comentarios que reivindican a las mujeres cuando ocurren casos como el de la CGTP, o cuando una dama se presenta de candidata a algún cargo, me hacen ver que continuamos en un mundo más que machista. En una visión miope de la política, pensamos que no tienen posición política y no representan más que a las mujeres.

Resulta que ahora la CGTP tomará nuevos rumbos y será férrea opositora al régimen neoliberal del gobierno; "se abre una nueva etapa para los andares del gremio que aglutina a la mayoría de sindicatos del Perú", dicen algunos.

Como si la presidenta Sifuentes, no tuviera militancia política e intereses particulares que defender (dicen que es de Patria Roja), y que por es mujer, el asunto ya está solucionado. Imagino que lo mismo se hubiera dicho si Lourdes Flores (derechista) ganaba la presidencia nacional.

No yendo lejos de Puno, actualmente la Universidad Nacional del Altiplano está presidida por una mujer. Martha Tapia Infantes es quien ganó la rectoría con el apoyo de un grupo de docentes y estudiantes.

No obstante, el ingreso de esta señora a la UNA no ha cambiado el rumbo de la llamada primera casa superior de estudios. El tufillo de corrupción se respira al igual que antes (cuando el rector era varón), los negociados de notas continúan, es mas, las chicherias y cantinas inundan más que antes a la Ciudad Universitaria.

Y en general la universidad sigue en marcha; pero con problemas como las imposiciones de grupos políticos que buscan sus intereses. Por ejemplo, ahora los catedráticos tendrán vacaciones sin haber concluido el año académico.

Otro ejemplo claro son nuestras “madres de la patria”, pues a muchas de ellas les importa un bledo ser mujeres y han impuesto sus intereses (políticos y de cualquier tipo) antes que defender a la sociedad como una “madre”.

De cualquier modo, es necesario dejar en claro que si bien las mujeres tienen el justo derecho a reivindicarse en nuestro mundo machista, ellas no representan la solución integral. Tengo la particular opinión que no debemos dejar crecer nuestras esperanzas de cambio, cuando las damas adquieren responsabilidades representativas.

Sino, pregúntele a los del SUTE (CEN nacional) que tienen a Caridad Montes como secretaria general desde hace más de un año...
Nota: Tengo la certeza que muchas y muchos me tildarán como un machista empedernido, después de leer este comentario.