domingo, diciembre 24, 2006

¿Es esta la navidad que queremos?


Por: Hugo Supo

Carita sucia, no lleva zapatos, calza ojotas, con su tacita maltratada y jalando de la mano a sus dos menores. Corre, se emociona, tropieza, no importa, hay que seguir, se debe ganar la “cola”. Debe tener ocho años o algo menos, debe ser el mayor, quizás su padre no esté vivo, o tal vez, su mamacita es la que se fue al cielo. A su corta edad no sabe disfrutar una sonrisa, no la comprende.

Se detiene…observa. A su alrededor hay más de una oportunidad. A diferencia del año anterior, al dueño de la distribuidora de cervezas se le ocurrió ser “misericordioso”; en realidad, tal vez, lo que busca es sentirse mejor consigo mismo.

_ ¡Qué bueno soy!.. Miren como comparto lo mío, se dirá para sus adentros.

Una cuadra más allá, los locutores de una radio –los chiquillos ni siquiera saben cuál de las tantas- también reparten juguetes chuscos y baratos, los acompañan con un pedazo de bizcocho y chocolate mal cocinado. Como ingrediente especial del día, el “superevento” es transmitido en vivo y en directo.

_ ¡Este es otro trabajo de su radio, la que se identifica con su gente, lo que pasa es que aquí si trabaja gente solidaria, en la más popular!, se escucha en una FM local.

Justo al frente, los propietarios de una cantina decidieron exculparse de sus malos comportamientos, convocando a los que menos tienen, como queriendo mostrarse solidarios. Una semana antes, un muchacho fue asesinado a unos metros de allí, luego de que saliera embriagado de ese antro y a nadie le importó.

_ Tenemos tres opciones, pensaron los muchachitos con tacitas en mano.

El mayor, queriendo sacar provecho de la presencia de sus hermanos, ordena.

_ Julio, tú, corre a la radio; Chato, tú, allí la señora de la “chicheria” está dando juguetes, yo me quedo aquí.

En la mente de los que por estos días del año se piensan más solidarios y más humanos, quedará una satisfacción interior.

_ Oye diosito, mira lo que estoy haciendo, yo si me merezco el paraíso. No olvides enviarme un regalito eh… “ recuerdas el que te pedí?.

Sonreirán para si y para los suyos, ignorando que abrió aun mas, la amplia brecha que separa a los hombres de nuestro país, ignorando que logró discriminar a muchas “caritas sucias”, obligándoles a esperar su “donación” en medio del sol o de la lluvia...presumiendo a medio mundo su “caridad”.
Les pregunto: ¿Es esa navidad que deseamos para el mundo?.