jueves, octubre 23, 2014

Juliaca

Por: Hugo Supo

Con todo el potencial que tiene, Juliaca podría convertirse en la Ciudad Comercial del Perú. Hay muchos ejemplos en el mundo, como en China comunista donde funcionan centros comerciales tan grandes como la misma Ciudad de los Vientos o, sin ir lejos, en las llanuras de Brasil que han logrado corredores envidiables.
El problema es que la sociedad juliaqueña es aún joven, formada por una población migrante que se ha asentado desde hace menos de un siglo en esta pampa, para la cual es difícil ponerse de acuerdo en su norte y el método para llegar a tal meta.
En principio, quienes tenemos vocación juliaqueñista, necesitamos un liderazgo visionario, este debe convocar a la firma de un “gran acuerdo ciudadano” que nos permita implementar en los siguientes periodos del gobierno edil, lo que diríamos una sola “política de Estado local”.
Este instrumento de concertación nos daría la posibilidad de juntar intereses supremos para avanzar hacia la modernización.
¿Qué intereses supremos tenemos? Hay que comprender que el comercio –mayorista y minorista- no parará, por eso, más bien necesitamos impulsarlo para que mejore en estándares de calidad.
De allí que surge el gran sueño de convertir a Juliaca en una verdadera “Ciudad Comercial”, con corredores peatonales que nos lleven a tiendas o puestos de venta de todo lo que queramos, que podrían ubicarse en sus calles, perfectamente zonificadas, con vigilancia pública y privada, bancos, centros de entretenimiento, acceso al transporte público, etcétera.
Que el nuevo alcalde asuma el reto, podría empezar por crear un programa municipal cuya tarea inicial tendría que ser implementar el “Proyecto Piloto Ciudad Comercial” en la calle peatonal Moquegua.
De otro lado, el sector transporte también requiere de atención especial, otro programa municipal debe ordenar este flujo. Para eso es urgente habilitar las avenidas troncales que permitan al conductor llevar al pasajero a su destino con rapidez y comodidad, sin el temor de cruzarse con triciclos o mototaxis y causar accidentes, para los cuales debe habilitarse otras vías más pequeñas.
Necesitamos pues diseñar el mapa del flujo vehicular a todo nivel, incluyendo a los autos particulares, ciclistas y peatones. Yendo a la idea anterior, iniciemos con un proyecto piloto, el centro histórico es ideal para ello.
Si a estos dos temas grandes le incluimos la seguridad y la recuperación del río Torococha para transformarlo en un gran parque turístico que cruce la ciudad, diremos, con seguridad, que avanzamos hacia ese sueño que dará solidez al orgullo juliaqueño. Feliz 88 Aniversario. (Publicado en Correo Puno 23/10/14 Foto: Internet)