jueves, abril 16, 2015

Investigación a medias

Por: Hugo Supo

La nulidad del título de ingeniero empresarial e informático para el señor Paúl Noé Apaza Humpiri, y su expulsión de la Universidad Andina Néstor Cáceres Velásquez (UANCV) es una decisión que no podía aguantarse más tiempo.
El Consejo Universitario ha optado por comunicar la sanción en un periodo prudencial, antes que la opinión pública etiquete a sus miembros como cómplices de la irregularidad, aunque ese caramelo parece ser solamente para calmar tempestad.
Asimismo, los 11 trabajadores de la universidad privada que han sido “sancionados” con una suspensión de un año, tienen responsabilidad seguramente, empero aparentan, a la franca, ser el chivo expiatorio de esa olla de grillos en la que se ha convertido la UANCV.
Ninguna autoridad de la cúpula mayor ha admitido más responsabilidad que su inocencia, de manera que este castigo blandengue es una muestra más que vivimos una especie de “síndrome de Pilato”. Todos se lavan las manos cuando la desgracia asoma, todos se salvan como pueden, todos tienen la culpa menos nosotros mismos.
Ahora, en la UANCV han empezado movimientos extraños, como ese cambio de los comisionados para la pesquisa por la “titulación récord” que, según denuncia el catedrático Luis Chaiña, es solo una maniobra para tapar el resto que aún faltar investigar.
Por estos antecedentes vemos harto difícil que las averiguaciones avancen en forma transparente. Falta conocer por ejemplo, ¿cómo es que el señor Apaza Humpiri, aparte de sacar un título de ingeniero en dos años, a la par lograba sus grados de magister y doctor?
¿Quién o quiénes fueron cómplices de esas andanzas?, ¿acaso no quieren que salga a la luz que el propio rector Julio Huamán presidió el jurado de tesis doctoral del cuestionado Paúl Apaza?, ¿y en qué quedarán los otros casos, incluso de “periodistas” y funcionarios universitarios afines al clientelismo? Reiteramos: la SUNEDU tiene la palabra. (Publicado en Correo 16/04/15 Foto: Internet)