Por: Hugo Supo
Tan inexorable es el tiempo que a esta
altura del año ya es inevitable vislumbrar las próximas
candidaturas al Gobierno Regional de Puno. Después de los nombres
que hemos mencionado en otras entregas, ahora se confirma la
postulación de Lucio Ávila Rojas, actual rector de la UNA.
Fijada su meta presidencial, esta
semana ha decidido alejarse del rectorado a modo de vacaciones y,
seguros estamos, para preparar su equipo de campaña.
Ahora bien, el ciudadano que observe
esta alternativa, necesariamente, tendrá que darle una ojeada a la
gestión universitaria, tomando en cuenta que es la carta de
presentación del aludido aspirante.
¿Y cómo va la universidad? La verdad
es que aún está lejos de lo que los puneños soñamos, sobre todo
en investigación proyectada a solucionar los problemas locales.
No vamos a negar que se ha avanzado, en
principio regularizando los semestres que estaban retrasados desde el
primer quinquenio del siglo, luego inyectando proyectos de
infraestructura que estaban dormidos desde tiempos de Juan Astorga y,
quizás lo más impactante, con su última publicación de textos
puneños. Hay que agregar otro plus: en la reciente medición de
calidad universitaria, la del Altiplano ha recuperado un par de
posiciones.
Empero todo esto es insuficiente porque
a nivel de la sociedad la percepción de una universidad aislada se
mantiene, quedando pendiente cumplir su visión.
También es cierto que algunos males
son estructurales y obstruyen para avanzar, la universidad es una
muestra de lo que ocurre en la gran sociedad peruana y sería tanto
como pedir peras al olmo cambiar esa realidad de la noche a la
mañana.
Así está el rector Ávila, en medio
del camino. Para este año ha prometido las ansiadas acreditaciones
de las carreras profesionales, vamos a esperar que cumpla. Esas
mismas promesas podrían ser -ya en campaña- su punto de impulso o
caída en las preferencias electorales. (Publicado en Correo Puno
10/04/14) Foto: Los Andes
