Por: Hugo Supo
Tomando en cuenta que Puno juró la
independencia de España en diciembre del año 1824, vale
preguntarnos -a prácticamente 10 años de cumplir el Bicentenario-
si han valido la pena estos dos siglos de intentar construir una
República en el altiplano.
La Ciudad de la Plata cumple hoy 345
años y puede resultar redundante indignarse por la poca visión de
desarrollo de nuestras últimas autoridades, así que vamos a dejar
de lado los cuchucientos cuestionamientos que tendríamos que hacerle
al alcalde Luis Butrón o al presidente regional Mauricio Rodríguez.
No vale la pena.
Estas lineas no son para las
autoridades ni los burócratas de nuestras aletargadas instituciones,
esta prosa es para ponerle un alto al camino, para mirar el horizonte
en nuestro andar como pueblo puneño hacia el Bicentenario, que es el
aniversario más importante que cumpliremos en los años venideros.
¿Qué vamos a regalarnos como pueblo
en este cumpleaños? Faltan poco más de diez años, es el momento de
dejar las quejas por la exclusión limeña para poner las manos a la
chamba. Es tarea de todos. Hemos perdido la esperanza en el señor
Butrón, poco podemos pedirle a él, con que inicie la añorada
Planta de Tratamiento de Aguas Servidas para evitar la contaminación
del lago Titicaca y se retire a casa será suficiente. Hay que ser
realistas, no hará más.
Luego, esta capital regional necesita
de agua potable -al igual que otras ciudades importantes- y para ello
hay que tomarse en serio los proyectos de represamiento que no
solamente ayuden a una mejor agricultura y ganadería, sino también
para el consumo humano.
Podría resultar una idea lejana, pero
es urgente que nuestros ingenieros ya estén buscando la manera de
trasvasar el abundante líquido elemento que tenemos en la selva
puneña para el altiplano. ¿No es necesario recordar que el cambio
climático hará que la escasez se sienta en poco tiempo, verdad? Si
hay mejores ideas, bienvenidas sean.
Si priorizamos ello, tendremos
asegurados el agua y desagüe, y si a eso le sumamos las obras de
infraestructura que seguramente prometerán los candidatos en el año
que viene (carreteras, colegios, hospitales, aeropuertos y otros),
podríamos empezar a creer que somos una sociedad para la que valió
la pena gritar libertad y pensar en dar los siguientes pasos rumbo al
desarrollo. Mantenemos el optimismo, feliz aniversario
Puno.(Publicado en Correo Puno 4/11/13)