jueves, enero 25, 2018

Licitación de la vía Kelluyo-Pisacoma

Por: Hugo Supo

El gobernador regional de Puno, Juan Luque Mamani, ha pedido calma ante la ola de evidentes irregularidades en la licitación pública N° 005-2017-CS/GRPUNO, para el asfaltado de la carretera Dv. Desaguadero – Kelluyo – Pisacoma.
“Aquí no hay favorecimientos a nadie, porque la comisión especial es autónoma, ellos tienen que resolver todos los puntos y observaciones que tiene”, dijo en reciente comunicado de prensa. 
Sin embargo, la lentitud con la que reacciona la autoridad podría interpretarse con malicia y quedar hasta como cómplice de una comisión de licitación que ha hecho un trabajo pésimo a la hora de seleccionar al consorcio ejecutor del proyecto vial.
Sobre todo si tenemos en cuenta que estas denuncias vienen de hace semanas y harta agua ha corrido bajo el puente desde entonces.
De manera que si el gobernador quiere demostrar que no hay favorecimientos, tendría que prestar mayor interés a las licitaciones que hace su personal de confianza. 
No basta con decirlo, hay que actuar también. Y actuar significa no callar que en dicha licitación se han presentado varias empresas, pero solo dos han pasado hasta la etapa final (consorcios Puno y Chucuito); curiosamente estas empresas presentaron al mismo grupo de ingenieros como parte de su staff, lo que ya dice mucho de sus intenciones. 
Asimismo, el ganador (consorcio Puno) no ha garantizado tener la maquinaria correspondiente ni la solvencia económica exigida en las bases de licitación. 
Otros documentos expuestos en diferentes ediciones del diario Correo evidencian que la comisión se ha hecho de la vista gorda al calificar positivamente al consorcio Puno sin cumplir con varios requisitos.
Y la cereza de la torta, ahora se sabe que los ingenieros presentados para ejecutar dicha obra, habrían adjuntado certificados laborales falsos. ¿Qué espera para anular la licitación y acelerar uno nuevo para ejecutar la carretera lo más antes posible, señor Luque?