jueves, septiembre 18, 2014

Walter Aduviri

Por: Hugo Supo

Hay quien dice que los periodistas no deberíamos de hablar del postulante Walter Aduviri, hay quien afirma que abordarlo es tanto como apoyarlo en su demagógica campaña. Este columnista no piensa lo mismo, somos más bien de los que no condicionamos el discurso o el silencio a la coyuntura. Así que están equivocados los Aduviri Boys con esa invocación al silencio con tufillo a mordaza que lanzan por las redes.
A Walter le han dicho que puede ser presidente, él mismo no deja de soñar con el puesto desde hace casi una década, le han instruido que para ello tiene que ser protagonista de este cuento, claro, también le han recomendado ubicar a su antagonista.
He allí la explicación de subirse al carro del “Aimarazo” en el 2011, y lanzarse al estrellato mediático bajo el patrocinio de Beto Ortiz, el primer paso estaba dado entonces. Luego caviló y determinó que -como le había funcionado bien eso de aparecer en los medios- su antagonista debía ser también el poder mediático que le dio fama. Y eso es porque ningún otro dirigente, líder, político o autoridad lo enfrentó, solo la prensa, solamente los periodistas, sus antagonistas.
Aduviri es, pues, un producto puramente mediático. Y no extraña que siga atacando a sus antagonistas, pese a que algunos (Cuarto Poder) le hagan el favor de limpiarle la cara. Su estrategia es así, no dejará de atacar a la prensa.
Precisamente por eso mismo el joven Walter teme a los medios, le afecta lo que decimos, suplica para que sus seguidores no crean en las portadas de Correo. ¡Graciosísimo!
Y mientras insulta a Correo para victimizarse, también envía a sus emisarios para pedir que lo “apoyemos” en el matutino que tanto dice despreciar (hasta podría dar nombres y fechas).
Sol Carreño dijo que las propuestas de Walter deberían dar miedo. ¿Miedo?, ¿por qué? Walter Aduviri no representa ningún miedo, él no es el enemigo del sistema, ni siquiera tiene idea de qué es el sistema; ergo, quien quiera votar por él que lo haga, aunque ojo, tampoco representa esperanza, no es esa fe que promete de pueblo en pueblo.
 Ya lo verán, Aduviri podría llegar al Gobierno Regional, pero su paso será como la de cualquier demagogo mediocre, uno más del montón. (Publicado en Correo Puno 18/09/18 Foto: Internet)