Por: Hugo Supo
La nominación de la ciudad de Puno
como “Capital del Folclore Peruano” y la llegada del 22 de
agosto, cuando se rememora el Día Mundial del Folclore, motiva
reflexión a los puneños, pues está vigente el debate por saber si
lo nuestro es mero folclore o en realidad se trata de una milenaria
cultura que pervive con los siglos.
Remitámonos a la historia. La palabra
folklore fue inventada hace más de 120 años el profesor inglés
Williams Tohms, quien se dedicó a estudiar las antigüedades de los
pueblos y formó la palabra uniendo los vocablos: Folk (pueblo) y
Lore (saber).
El término se usó para nombrar a una
nueva ciencia que se encargaría de estudiar el saber tradicional de
las clases populares en las naciones civilizadas.
Es decir, aquel “saber tradicional”
que se ha aprendido por transmisión oral y que ha venido de
generación en generación.
De esa manera, Tohms fue uno de los
primeros estudiosos en poner en blanco y negro la característica
elitista de la cultura.
Al sostener que las naciones
civilizadas tenían también saberes tradicionales, implícitamente
se estaba diciendo que la cultura era para pocos.
¿Es cierto esto? Con el riesgo de
atormentar a los estudiosos antropologizados, diremos que sí,
efectivamente la cultura es elitista.
Necesita serlo para autoprotegerse de
-por ejemplo- la sociedad del espectáculo de la que Mario Vargas
Llosa escribe en sus ensayos.
Luego, en oposición a los elitistas
salieron precisamente los antropólogos y afirmaron que la cultura no
debe ser así. “El pueblo también tiene derecho a la cultura”,
“todo modo de expresión o vivencia es cultura”, dijeron basados
en la relatividad.
Para no sentirse mal pusieron en boga
un nuevo concepto: “cultura popular”.
Y en ese contexto, en el altiplano nos
hemos pasado discutiendo si lo nuestro es elitista o popular, sin
avizorar lo que es obvio: nuestras civilizaciones siempre han tenido
de ambas.
Aunque también es cierto que el
folclore es lo que mayormente aflora en nuestros pueblos. En sus
fiestas por ejemplo.
No así la cultura, aquella que implica
conocimiento que aporta a la universalidad, esa es la que recién
despierta. (Correo Puno-Juliaca 20/08/15 Foto: Internet)