domingo, marzo 09, 2014

El presidente Rodríguez

Por: Hugo Supo

Poca astuta ha sido la réplica del presidente regional de Puno, Mauricio Rodríguez, a la difusión del caso de firmas falsas para la aprobación de los 85 jardines que el Ministerio de Educación le ha encargado a su gestión.
Nada puede justificar un escándalo así. Porque señor presidente, claro que se trata de un escándalo, no es plata de la familia Rodríguez o de alguno de sus gerentes. Los indicios de existencia de una organización dedicada al robo sistemático de los recursos del Estado al interior del Gobierno Regional son irrebatibles.
Atacar a los periodistas, minimizar los hechos, echarle culpas al denunciante, mostrar actitud protectora a favor de los cuestionados, no admitir yerro, la arrogancia; todo eso se resume en un enceguecido orgullo que ha sido herido.
Y el presidente regional ha dicho bien, esta revelación no parte de una proeza periodística precisamente, los medios se han limitado a informar lo que su propia gente hace. No tiene sentido entonces que la autoridad dirija su furia hacia lo externo cuando él mismo es consciente que la escoria está dentro, se sienta a su costado, le adula, le aconseja, lo engaña. Él lo sabe y no quiere admitirlo.
Pero, a diferencia de lo que la autoridad hace con los periodistas, nosotros sí comprendemos su situación, sabemos que hay males estructurales como la corrupción, que -sobretodo en política- no hay que confiar en la gente, que los vividores suelen trepar al poder valiéndose de las debilidades egocentristas de los titulares de pliego, etcétera.
Como comprendemos también que el presidente no puede escapar de sus responsabilidades. Ahora que se le viene un juicio, esperamos que el líder del “Pututo” haya aprendido que ser presidente no solo es un bonito despacho y la parafernalia de la oficina de relaciones públicas, es también cargar con el pasivo, para eso ha sido elegido.
Hemos visto que está lejos el día en el que Mauricio Rodríguez haga mea culpa, advertidos estamos, él es de la generación formada echándole la culpa al resto del mundo de nuestras desgracias y allí se va a quedar. Hay que desearle suerte a este presidente para el último tramo que le toca caminar, pues sus problemas apenas están empezando. (Publicado en Correo Puno 10/03/14) Foto: Correo