Por: Hugo Supo
Asoma en estas elecciones la dicotomía izquierda-derecha
para clasificar a los contrincantes de la segunda vuelta regional. No así desde
el PICO, los de Democracia Directa se han apresurado en embanderarse como
izquierdistas; en contraposición etiquetan a su rival como de derecha, o socio
al menos.
Sin embargo, cuando uno lee los planes de gobierno
simplemente no encuentra diferencias que puedan ayudar a esa catalogación
forzada que quieren lograr los marketeros de la presente campaña.
Está claro que tanto Luque como Aduviri van por rumbos
similares a la hora de presentar los programas de una posible gestión. ¿Qué los
endilga entonces a la izquierda o derecha?
La temprana declaración de PPK “a favor” de Juan Luque es un
argumento superfluo para achacarle la infructuosa historia electoral de derecha
en el altiplano, igual rol ha jugado por cierto el congresista Rimarachín al
expresar su apoyo al joven aimara antes del 5 de octubre.
No hay pues argumentos válidos para discutir la pertenencia
de los candidatos a tal o cual opción ideológica; aún más si tenemos en cuenta
que postulan a un cargo subnacional, ni siquiera al de una región, sino
departamental, que en no muy lejanas circunstancias solían designarse a dedo.
Que no nos distraiga la discusión izquierda-derecha en este
momento, los dos representan más bien un progresismo social que compartimos
como experiencia la mayoría de puneños: nacimos en el campo, nos enviaron a la
escuela, fuimos a la universidad y aquí estamos, mirándonos como si proviniéramos
de planetas distintos. ¿Cuestión de estilos?, sí pues, pero ese tema es para
otra entrega.
A lo que nos abocamos en el presente escrito, es a aclarar
la poca influencia del factor derecha-izquierda en el resultado de las
elecciones. O para que no se resientan los ideologizados, diríamos que no hay
izquierda ni derecha pura aquí, somos, como en casi todo, un mestizaje
posmoderno.
De otro lado, flaco favor le harían a Walter Aduviri al
etiquetarlo de izquierdista, los gobernantes de los últimos 12 años en Puno no
son precisamente los mejores ejemplos. Y gran error sería para Juan Luque
irrogarse de derecha, esa a la que ni le interesa quien gobierne este
territorio, ya que la Hoja de Ruta de Humala es suficiente garantía para ella.
(Publicado en Correo Puno 13/1014 Foto: Internet)